Alquiler de esquís

Llegada a Jaca. Directos al alquiler de material deportivo.

Ya hemos llegado. Sin incidentes reseñables. Todos bien y de una pieza. Algún que otro mareado pero poca cosa. Vamos a alquilar.
Los esquís según nos explican los de la tienda deben de ser un poco menos de nuestra altura , antes eran mucho más largos. Las botas tienen que permitirnos mover los dedos de los pies (si no es que están pequeñas), y los palos puestos boca abajo y apoyados en el suelo deben de marcar un ángulo recto en nuestro codo una vez flexionado el brazo. ¡¡Madre mía que complicado es esto!!

Los profesores nos hacen un tatuaje con rotulador permanente en la mano, nos han escrito un número de cuatro cifras ¿para qué será? y dicen que aunque esta semana no nos la lavemos no pasa nada, que nos lavemos con la otra.